La vasectomía sin bisturí es una técnica mínimamente invasiva que ofrece una alternativa a la vasectomía tradicional. Se realiza una pequeña punción en el escroto, sin necesidad de utilizar bisturí. A través de esta punción, se accede a los conductos deferentes, los tubos que transportan los espermatozoides desde los testículos hacia la uretra. Estos conductos se cortan y se sellan para bloquear su paso. Esta interrupción evita la fertilización del óvulo durante la eyaculación.

• Recuperación más rápida
• Menor riesgo de complicaciones
• Procedimiento menos invasivo

• Higiene: Es importante que llegues aseado al procedimiento, con el vello de la zona genital recortado. 
• Ropa cómoda: Usa ropa cómoda que te permita moverte con facilidad.

La vasectomía sin bisturí se realiza de forma ambulatoria, con anestesia local la mayoría de las veces, también se puede realizar con anestesia regional. El procedimiento dura aproximadamente 30 minutos.

• Reposo: Se recomienda descansar durante el primer día después del procedimiento.
• Hielo: Se pueden aplicar compresas de hielo en el escroto para reducir la inflamación y el dolor.
• Medicamentos: Es posible que te receten antibióticos para prevenir infecciones y analgésicos para aliviar el dolor.

La vasectomía sin bisturí es un método anticonceptivo muy efectivo, con una tasa de éxito superior al 99%.

El procedimiento es efectivo después de 3 meses o 25 eyaculaciones, ya que se requiere tiempo para que los espermatozoides restantes en los conductos deferentes sean eliminados.

La vasectomía no es permanente y existen procedimientos para revertirla. Sin embargo, la reversión no siempre es exitosa.